Al despertar a la mañana, mi mente se activa como una computadora que, al arrancar, pone en funcionamiento sus programas automáticos. Para mí, escribir es una de las formas de tomar consciencia de esas automatizaciones del pensamiento y la sensibilidad.
Durante varios meses de 2020, escribir a la mañana se me hizo casi imprescindible. Estos son mis diarios matinales de los últimos meses de ese año tan particular. Una exploración personal, perceptiva y filosófica. Con fotos y dibujos de esos tiempos.
77 páginas
Letra grande, cómodo para leer en el celular
Formato: PDF