¿Qué pasa cuando nos interesamos por lo que nos pasa?
Con esa pregunta como brújula, te invito a reconocer que el obstáculo es materia prima
6 encuentros grupales para desplegar el potencial creativo a través del diálogo con la dificultad.
A QUIÉN va dirigido:
Artistas (con cualquier nivel de experiencia) que quieran desplegar su potencial creativo a través de la indagación de sus obstáculos, bloqueos y dificultades.
Comienza: comienza el 17 de enero 2025 – 6 encuentros
Horarios posibles: viernes 11.30am / viernes 3pm / viernes 7pm (hora Argentina)
(Al LLENAR EL FORMULARIO, elegir las opciones de horarios posibles)
Modalidad: virtual
Duración encuentros: 2 hs
Coordina: Jada Sirkin
Más sobre la propuesta
“La curiosidad es un amigo más próximo que la creatividad”
Declan Donnellan
TE INVITO a un espacio grupal en que nos ayudamos mutuamente a desinhibir el canal creativo mediante la indagación.
¿Qué es indagar? Indagar es decidir interesarnos por lo que no queremos interesarnos.
La premisa: todo es materia prima
El camino: indagar
El primer paso: reconocer la resistencia a la indagación
El proceso: explorar los relatos con los que tejemos la traba
El entrenamiento: desarrollar el músculo de la curiosidad
El resultado: transformar la resistencia en celebración, en interés, en posibilidades de juego, aligerar el drama para abrir espacio de maniobra, reconocer el obstáculo como materia prima, entablar diálogos creativos con la dificultad, potenciar el trabajo y permitir que la obra crezca y brille
HIPÓTESIS:
El obstáculo es la voz de un punto ciego, la manifestación de lo que todavía no supimos ver, aquello a lo que no queremos dar atención, lo que creemos no merece nuestro interés. Si el obstáculo es resistencia al interés, ¿qué pasa cuando nos interesamos por esa resistencia a interesarnos? ¿Qué hay detrás del des-interés?
Trabajamos con los relatos que condicionan nuestras posibilidades creativas. Cambiamos de lógicas y contextos: con la obra como norte, con el resultado como organizador de la energía creadora, nos enfocamos en el proceso para descubrir la materia prima profunda de nuestro arte.
Tendemos a pensar al obstáculo como aquella dificultad a superar para después poder crear. La propuesta es pensar al obstáculo como pista de baile y a la dificultad como materia prima.
Los obstáculos nos obstaculizan sólo cuando nos resistimos a mirarlos. Todo obstáculo expresa la voz de un miedo. Mirando al obstáculo de frente descubrimos al temor que hay detrás. Mirando al temor, descubrimos al deseo.
Llamo deseo a la curiosidad que nos mueve a crear. Se trata de una fuerza no-tan-personal (o no-solamente-personal) que no tiene que ver con conseguir cosas que creemos que necesitamos, sino con expandirnos hacia la novedad.
La confianza está más en el proceso que en el resultado. La desconfianza (el temor) es parte del juego. Como decía Rollo May, no creamos a pesar del miedo sino con el miedo. Te invito a dialogar con el bloqueo.
Crear implica recrearnos. Modificar algo en el mundo implica modificarnos. Captar transmisiones poéticas inexistentes implica recalibrar la antena que somos en tanto artistas.
Pienso al arte como contexto de contención en que podemos descansar de la carrera por cubrir las necesidades básicas de la vida cotidiana. Poner en pausa el modo-supervivencia nos permite explorar de otras maneras. A su vez, al disponernos a la exploración artística, la personalidad (el ego) opone resistencias. Explorar esas resistencias libera los potenciales de creación y nos vitaliza. Al compartir la exploración en grupo, la indagación se potencia. En el reflejo de lxs otrxs, nos encontramos. Al exponernos, servimos también a lxs otrxs, que encuentran, en nuestros relatos y experiencias, claves sobre sus propios procesos.
A lo largo de los 6 encuentros iremos avanzando en la exploración de nuestros procesos creativos, desinhibiendo canales de circulación de energía creativa, reconociendo movimiento donde veíamos fijación, dinamizando nuestra relación con la obra que va tomando forma, descubriendo puertos y resultando, reconociendo nuevos nortes, abriendo caminos, dando pequeños pasos.
Se propone a cada participante elegir un proyecto de obra artística en cualquier etapa de desarrollo. Puede ser un proyecto en su fase inicial de idea, o en una fase más avanzada de concreción.
Testimonios de participantes del Vol.1
«Del laboratorio me llevo una visión amplificada del proceso creativo, la posibilidad de frotarme con el obstáculo. Me llevo la posibilidad de ser contenida, sostenida, acompañada por el obstáculo. Descubrí que no sólo me interesa el obstáculo, sino que me gusta. Me nutre reconocerme en la materia de la que están hechos los obstáculos.»
«Me llevo nuevas preguntas. Descubrí que cuando aparecen obstáculos no tengo que salir corriendo, puedo quedarme y tomar al obstáculo, sin querer evitarlo. Descubrí mis miedos y su necesidad de ser acompañados. Descubrí que necesito personas cómplices con las que crear.»
«Descubrí que estoy orgulloso de lo que hago. Descubrí o recordé que tengo mucho por aprender. Descubrí adónde están mis puntos débiles para trabajar y dar luz. Durante el taller pude reconocer qué es lo que estaba descuidando.
«Aprendí que puedo superar mis auto-sabotajes y permanecer, no salir corriendo. Aprendí que tengo la capacidad de comprometerme con mi proceso creativo. Descubrí falsas encrucijadas.»
«Descubrí que el tiempo que dedico a mis proyectos es una inversión. Descubrí que es tiempo de asumir el foco, en qué me quiero enfocar.»